¿Por qué necesitamos una nueva definición de inteligencia emocional?
La inteligencia emocional es un aspecto de la inteligencia y hay muchas definiciones que se refieren a la capacidad de reconocer, utilizar, comprender y gestionar conscientemente las propias emociones y las de los demás.
Pero no estoy de acuerdo. No somos robots que puedan controlar y gestionar nuestras emociones, pero sí podemos controlar y gestionar nuestras reacciones ante una emoción.
La inteligencia emocional es una habilidad que nos ayuda a percibir, comprender y gestionar nuestras propias reacciones y las de los demás cuando la mente nos ofrece una emoción en respuesta a una experiencia que estamos viviendo.
Para entender mejor esta nueva definición de inteligencia emocional que he publicado en mi nuevo libro SMART MASTERMIND tenemos que dejar atrás algunos conceptos obsoletos de la psicología tradicional, y mirar hacia la psicología primordial.
Primero debemos comprender que no somos nuestra mente, sino una conciencia primordial de naturaleza espiritual.
La naturaleza ontológica del ser humano es espiritual. Estamos dotados de una herramienta de a bordo muy sofisticada que es nuestra mente y que nos permite interactuar en el mundo físico.
Nuestra mente nos permite conectar con la materia en el mundo material y, por tanto, permite esta conexión dimensional entre nuestra dimensión espiritual y la dimensión física del mundo material.
Cuando tenemos una experiencia, la mente nos ofrece una emoción. Nuestras emociones nos las ofrece nuestra mente como respuesta a la experiencia que estamos viviendo.
Ante una emoción, podemos reaccionar con un método reactivo (sufriendo la “provocación”) o con un método reflexivo: actuando como un observador externo, observando lo que ocurre a nuestro alrededor tanto a nivel ambiental como psíquico, tomando conciencia del aquí y ahora, distanciándonos de los condicionamientos emocionales, despotenciando las cargas emocionales y contemplando.
Esta nueva definición de inteligencia emocional se basa en dos principios fundamentales:
- no controlamos ni gestionamos nuestras emociones, sino nuestras reacciones.
- no somos nuestra mente, así que la mente nos ofrece una emoción en respuesta a una experiencia que estamos teniendo.
Es una información muy importante para entendernos mejor a nosotros mismos, quiénes somos y cómo funcionamos. Es una información muy útil para aquellos que están comenzando su crecimiento espiritual para un despertar espiritual.
¿Por dónde se puede empezar? Empieza por potenciar tu herramienta de a bordo más sofisticada: ¡tu mente!
Aprovecha los recursos gratuitos para la mente que he puesto a tu disposición y accede al curso de POTENCIACIÓN MENTAL. Para saber más, consulte el PROTOCOLO ZELONI MAGELLI.